miércoles, 30 de abril de 2008

Una casa de putas

Pues eso, que en eso ha acabado este país convertido, en una casa de putas gracias a la ardua labor de la clase política que nos gobierna todos los días muy preocupada por tonterías y despreocupada de nimiedades como que los bancos hayan provocado la sangría que sufrimos y que a ellos les ha dado millones de €. Para más inri no hay mas que ver al politicucho de turno muy contento y de cháchara con algún banquero (grarantizándose la jubilación?).
Viene esta reflexión a cuenta de que la Generalitat Valenciana ha decidido pasarse por el forro los preceptos legales y aplicar en la medida de sus posibilidades el contrato para inmigrantes propuesto por Rajoy en su campaña y que dos semanas antes era una de las propuestas estrella en la página web de FAES.
Por mucho que los oigo no llego a entender qué utilidad tiene ese papel si no es para tener atado a todo el mundo y a la primera que esté en el paro, zas!!! que se vuelva a su país, porque como todos sabemos, un buen inmigrante es útil, cuando hace lo que no quiere hacer nadie a mitad de precio, sin derechos y calladito para que el hijoputa de empresario del terreno se pueda pagar su Mercedes.
Lo que pasa es que estos cabrones trabajan un poco y se creen con derechos así que hace falta algo para tenerlos bien acojonaditos y sumisos, no sea que se quieran quedar aquí y a mucho empresario desalmado le joda el negocio.
Y en esas anda el PP de nuestra comunidad... ayudando a la clase empresarial.

1 comentario:

Lucrècia de Borja dijo...

A la gent (en general) li la bufa la política. Estan més interessats en que hi haja Formula 1 i Copa Amèrica que en el que puga costar tot això. I tampoc es paren a pensar si fa falta invertir eixos diners en algun altre lloc més necessari...

Tenim el que ens mereixem.

Ciber-besets